miércoles, 21 de agosto de 2019

CHARLES BAUDELAIRE. LAS FLORES DEL MAL (LES FLEURS DU MAL): SU MÁXIMA OBRA CENSURADA POR LA MORALIDAD DE LA ÉPOCA

      Invocar los poemas de Charles Pierre Baudelaire (1821-31-1867) para evitar que el corazón se marchite, paradójicamente es remitirse a un paisaje tortuoso y decadente. Baudelaire fue un poeta, ensayista, crítico de arte y traductor francés. Paul Verlaine lo incluyó entre los poetas malditos de Francia del siglo XIX, debido a su vida bohemia y de excesos, y a la visión del mal que impregna su obra. Sin embargo, en sus poemas también se reconocen los elementos claramente románticos; entonces el genio y el poeta, son malditos para la sociedad por su bendición y capacidad de comunicarse con la naturaleza. Aunque esta virtud se paga con soledad y el sentimiento de la indiferencia, la incomprensión y la persecución.
       De este modo, la persona que tiene una sensibilidad innata tendrá que vagar por el mundo, como lo hizo Baudelaire; quien se abandonó al vértigo del infierno, o mejor dicho, a la Tierra mundana. Él nunca creyó formalmente en Dios, pero sí aceptó un poder superior que se escondía bajo la concepción de lo ideal. Y ante su imposibilidad de alcanzar lo supremo, se dejó carcomer por los sentimientos de maldad que habitan en el universo.

         Para el poeta maldito, la vida es un aprendizaje a partir del sufrimiento y la desdicha. Éste ser, que también es víctima de la feminidad terrible, está condenado a ser infeliz en este plano terrenal y lo único que le permite soportar el dolor es un consuelo divino. Por eso la figura del poeta es un santo, cuya estancia en la Tierra es una larga peregrinación, que debe de aceptar porque el dolor es el remedio a sus impurezas.
       La palabra 'spleen' -pieza fundamental para su libro "Las flores del mal" (1857)-, designa un estado mental de profunda melancolía. El título del primer apartado de esta antología poética es "Spleen et Idéal", a manera de contradicción o de palabras que se aniquilan la una a la otra. Con esta sencilla conjunción Baudelaire demuestra que el ideal, si pudiese ser alcanzado, sería el único y verdadero remedio para el spleen. Por consiguiente, el fracaso ante el ideal provoca la terrible melancolía que azotó al poeta maldito y que lo envolvió en las tinieblas hasta la muerte.

Las flores del mal (título original en francés: Les Fleurs du mal), es una colección de poemas de Charles Baudelaire. Considerada la obra máxima de su autor, abarca casi la totalidad de su producción poética desde 1840 hasta la fecha de su primera publicación. La primera edición constó de 1.300 ejemplares.
Las Flores del mal, es sobresaliente como una de las compilaciones más importantes de la poesía en la modernidad; aspecto que ejerció una influencia considerable en poetas como Paul Verlaine, Stéphane Mallarmé o Arthur Rimbaud.

El libro debió llamarse en principio "Los limbos" o "Las lesbianas", pues la intención primitiva era la de escribir sobre los pecados capitales; aunque Baudelaire renunció a ello, siguiendo los consejos de un amigo. Dicho libro fue catalogado de inmoral, ya que exaltaba el goce de la vida y de las pasiones.
A lo largo de toda la obra, Baudelaire juega sobre las correspondencias verticales y horizontales que más adelante inspirarán a otros muchos poetas; todo su poemario se construye como un itinerario moral, espiritual y físico. Divide el libro en siete partes, introducidas por el famoso poema Al lector: Esplín e ideal, Cuadros parisinos, El vino, Las Flores del mal y Rebelión, con una conclusión final: La muerte. Esta obsesión de que no consideraran su libro como una mera recopilación de poemas, sino como un libro con principio y fin, en el que todos los poemas se subordinan al ser elementos de una estructura general rigurosa; incidirá profundamente en poetas desde Stéphane Mallarmé hasta Jorge Guillén en su obra "Aire nuestro", y dará lugar a una serie de investigaciones sobre la posible asociación numerológica o astrológica e incluso un paralelismo con la Divina Comedia.

CONDENA POR LA PUBLICACIÓN DEL LIBRO EN 1857


El 20 de agosto de 1857, el autor es acusado de ultraje a la moral pública, por lo que se ve obligado a quitar seis de sus poemas. Ha de tenerse en cuenta que Baudelaire, a raíz de esta condena, se decidió a cultivar otro género literario que él califica más peligroso todavía que el poema en verso: el poema en prosa, del que nacerán "Los pequeños poemas en prosa" (o también conocido como "El spleen de París".
La condena por la publicación de Las flores del mal debido a su contenido herético y erótico, es un caso controvertido. Muchos de los poemas aparecidos en este libro, ya los había publicado Baudelaire en diversos periódicos sin penalización alguna. Pero la contradicción reside en la política ambigua contra ciertos escritores durante el gobierno de Napoleón III. En un principio la multa fue de 300 francos, reducida luego por la emperatriz a 50 francos, cuando por la publicación de los ejemplares de Las Flores del Mal cobró una octava parte del precio de catálogo, o 25 céntimos (el doble que por la traducción de cinco volúmenes de Edgar Allan Poe, que hizo entre 1856 y 1865): lo que se resume a un cobro de 275 francos menos la multa inicial reducida a 50.

La multa contrasta con el hecho de que Baudelaire recibía del estado francés 2500 francos -sueldo medio anual de un funcionario- de ayuda a la creación literaria, o el subsidio por enfermedad (la sífilis, de la que moriría en 1867 y que le mantendría durante su último año de vida bajo los síntomas de afasia y hemiplejía) para sufragar los gastos de la clínica en París. Este doble papel de la autoridad quería mantener la imagen de mártir de sus literatos, sin afectarlos directamente, circunstancia ésta que no destacan sus hagiógrafos.
La sífilis que padecía le causó un primer conato de parálisis en 1865 y los síntomas mencionados que arrastraría hasta su muerte, aparecieron con violencia en marzo de 1866, cuando sufrió un ataque en la iglesia de Saint Loup de Namur. Trasladado urgentemente por su madre a una clínica de París, permaneció sin habla, pero lúcido hasta su fallecimiento, en agosto del año siguiente. Fue enterrado en el Cementerio de Montparnasse, junto a la tumba de su padrastro. Su epistolario se publicó en 1872; los "Journaux intimes" (que incluyen Cohetes y Mi corazón al desnudo), en 1909; y la primera edición de sus obras completas, en 1939.

Tras su muerte, Charles Baudelaire sería considerado el padre o gran profeta de la poesía moderna.

"Ángel lleno de gozo, ¿sabes lo que es la angustia,
la culpa, la vergüenza, el hastío, los sollozos
y los vagos terrores de esas horribles noches
que al corazón oprimen cual papel aplastado?

        Ángel lleno de gozo, ¿sabes lo que es la angustia?"